«El mejor medio para hacer buenos a los niños es hacerlos felices». Lo escribió Oscar Wilde y nos ha parecido oportuno recuperarlo en estos días en los que niños y niñas vuelven al colegio después de las vacaciones de verano.
Nuevo curso, nuevos retos, nuevos compañeros y un objetivo por encima de todos: esa alegría a la que hacía mención el escritor irlandés. Para conseguirla es esencial gozar de buena salud. Por eso hoy vamos a compartir ocho consejos para una vuelta al cole saludable y feliz.
1. Lleva la mochila adecuada. Los niños y niñas cargan cada día con libros y material escolar, pero no conviene que las mochilas superen el 10% de su peso corporal del niño o niña. Deben ser ergonómicas para que se ajusten correctamente y se han de llevar colgadas en los dos hombros para equilibrar el peso. Además, se recomienda rellenarlas de dentro hacia fuera, poniendo los objetos más pesados y planos pegados a la espalda. Una buena opción es optar por una mochila con ruedas.
2. Prevén las infecciones. En el colegio los niños y niñas están más expuestos a virus, bacterias y parásitos. Por eso, el arranque del curso escolar es un momento perfecto para comenzar a implantar buenos hábitos de limpieza que nos ayude a mantenerlos a raya. Lavarse bien las manos, taparse al toser o cepillarse los dientes después de cada comida son algunos de ellos. Una dieta saludable, basada en frutas y verduras, también ayuda a prevenir las infecciones.
3. Revisa tu vista. Los problemas de visión pueden ser causa de fracaso escolar. Igual que escogemos mochila o forramos libros, visitar al oftalmólogo debería ser un preparativo más antes de la vuelta al colegio, sobre todo si tu hijo o hija tiene dolores de cabeza frecuentes, errores en la lectura o si se alega o se acerca demasiado los textos a los ojos. Además, hay que recordarse que es mejor estudiar con luz natural y que cada 20 minutos de estudio se debe descansar la vista mirando a lo lejos unos segundos.
4. Pisa fuerte. A la hora de elegir el calzado que acompañará a los más pequeños en la vuelta al cole debemos tener en cuenta, sobre todo, que sea cómodo, cómodo, flexible y que el niño o la niña esté a gusto con él. La horma del zapato debe adaptarse al pie de cada niño y el material ha de ser transpirable para evitar eczemas y hongos. Por último, deben ser fáciles de poner y quitar para facilitar la autonomía de los más pequeños.
5. Mantén a raya a los piojos. Se contagian con la misma facilidad con la que se contagia un resfriado y trae a padres y madres de cabeza. Pero es posible mantener a raya a los pijos: examina diariamente el pelo y el cuero cabelludo de tu hijo o hija; cuanto más corto es el pelo menor riesgo de contagio, así que recógeselo si tiene el pelo largo; por último, péinalo con una lendrera después de la ducha cuando el cabello esté todavía húmedo.
6. Come sano, come rico. Unos hábitos alimenticios saludables son esenciales para mantener una buena salud, sobre todo entre los más pequeños. Debemos priorizar el consumo de frutas y verduras en cada una de las cinco comidas diarias. Además es importante incluir lácteos, cereales y frutas en el desayuno. Por ejemplo, tomar un vaso de leche, una tostada de pan con tomate y aceite y una mandarina es perfecto antes de entrar en la escuela.
7. Duerme bien. Los niños y niñas deben dormir entre 9 y 11 horas al día para llegar al colegio repletos de energía que les ayude a afrontar otro día emocionante. Es importante establecer buenas rutinas de sueño, ya que el descanso influye directamente en el desarrollo del lenguaje y la capacidad de aprendizaje.
8. Diviértete haciendo ejercicio. El ejercicio físico es necesario para el desarrollo del aparato locomotor, del sistema cardiovascular y la coordinación, pero además es un método maravilloso de socialización, ahora que toca conocer nuevos amigos y amigas. Además, fomenta la confianza y la integración en el grupo.