De acuerdo con los datos que maneja la Organización Mundial de la Salud, el 50% de la población adulta de todo el mundo sufre dolor de cabeza.
Sus causas y síntomas y, por tanto, también la manera de tratarlo, varían en función de qué tipo de cefalea se trate.
Migraña
Una persona con migraña suele sentir un dolor intenso y punzante en un lado de la cabeza. Además de las causas genéticas, hay otros factores que pueden influir en que se desencadene un ataque de migraña:
- Deshidratación
- Cambios hormonales
- Malos hábitos del sueño, por exceso o por defecto
- Cambios en la meteorología
- Fuertes estímulos sensoriales (olores, luces o ruidos intensos)
Dolor de cabeza tensional
Casi todas las personas sufrirá un dolor de cabeza tensional en algún momento de su vida. Sentirán un dolor constante y sordo en ambos lados de la cabeza y podrán experimentar presión detrás de los ojos, sensibilidad a la luz y al sonido y malestar en la cara, cuello y hombros.
Aunque sus causas no están claras, parece que el estrés, la ansiedad y la depresión tienen mucho que ver con que se desencadene un dolor de cabeza de este tipo. Otros factores son:
- Deshidratación
- Falta de sueño
- Fatiga ocular
- Ruidos intensos
- Sedentarismo
- Higiene postural incorrecta
Dolor de cabeza en racimo
Las personas que sufren estos dolores de cabeza sienten un fuerte ardor o dolor punzante muy intenso detrás o alrededor de uno de los ojos. Los ataques duran de 15 minutos a tres horas y se pueden repetir hasta ocho veces cada día.
Su aparición está relacionada con los siguientes factores:
- Tabaco
- Consumo de alcohol
- Estrés
- Estímulos intensos de luz
- Liberación repentina de histamina o serotonina